domingo, 15 de enero de 2012

y en noches de melancolía...

Compartimos tanto, me enseñaste tanto... Aún recuerdo cuando estuviste conmigo, las sensaciones que me hiciste sentir, tan ardientes... Ese olor, cada nota de cada canción, inexplicable.
Una parte de mí te echa de menos no lo niego. Fuiste quizá demasiado importante para mí, me hiciste saber que era la felicidad, hiciste que me sintiera querida, hiciste que cada día me levantara con ilusión para ir a verte, todo esto y quizá más... ¿Por qué te fuiste? 


Lloro tu ausencia...

lunes, 12 de diciembre de 2011

Miedos...

Escuchando esa canción que me hacia sentir cosas anteriores a mi, justo en ese momento, vi su sombra, un escalofrió entro en mi cuerpo, apagué la luz. Tenía miedo. Era esa sensación inexplicable que ya había sentido más de una vez... Como si en alguna vida pasada, mi alma hubiera pasado por algo parecido... Una de las dos que me hacía sentir pequeña, totalmente desprotegida... Ocultada en la oscuridad de mi habitación observaba a través del velo de la cortina esa sombra que estaba en la otra ventana opuesta a la mía. Estaba enfrente, de pie, observante, me parecía... Atento a mis movimientos, vigilante, quizá intrigado a que hacía... Esperaba que no me viera a través de aquella cortina fusionada con la oscuridad. Mis ojos mantenían la mirada que mostraba el temor que sentía mi cuerpo en aquel momento, fue entonces cuando derrame lagrimas, cuando me dí cuenta que estaba sola frente a todo, nadie podría salvarme, nadie estaba a mi lado, solo yo. Mis movimientos eran cuidadosos y  mis pasos sigilosos, cualquier movimiento brusco o luz dada sería delatarse. En esa niebla negra vi pequeñas lucecitas, era mi osito de peluche de mi infancia, lo cojí y me le quede mirando con añoranza, esa inocencia que tenía de niña y entonces lo abracé y delicadamente me fui metiendo entre las sábanas de mi cama, acurrucándome como si me sintiera segura y la única protección que hicieran que saciaran mi llanto y el temor a las pesadillas fueran ese peluche y las sábanas tapando mi ser, al igual que cuando era niña...

jueves, 24 de noviembre de 2011

Creo que realmente ya está todo perdido,
creo que tú ya has decidido lo que quieres,
siento impotencia al estar a tu lado,
no sé si debería volver a meterme en tu camino...
Es todo tan confuso....
Eres tan complejo.
Quizá no pueda entenderte,
¿Será este mi verdadero destino?
Tengo miedo, odio las distancias,
amo esos ojos, esa sonrisa... no lo quiero perder.
¿Cómo puede ser todo tan doloroso?
Aveces pienso que ya no me afecta,
todo lo contrario, es tan torturante.
Cualquier fallo es la razón de tu respuesta.
Quizá no seas para mí,
Guerra entre la razón y el sentimiento.
Veneno. Suicidio. Crueldad. Oscuridad. Locura. Desafio.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Estoy harta de creer en algo que no existe,
hablo de eso a lo que algunos llaman amor,
harta de sentirlo sin haberlo llamado,
harta de sentirme vacía al ver esperar algo que no llega,
harta de promesas que nunca se cumplen,
harta de las palabras vacías, de las esperanzas nulas,
harta de las indecisiones de las que no encuentro conclusión,
harta de la impotencia al complejo sentimiento...


viernes, 21 de octubre de 2011


 "La vida es irónica. Se necesita tristeza para conocer la felicidad, ruido para apreciar el silencio y ausencia para valorar la presencia"

martes, 18 de octubre de 2011

Ella...

Ella siempre espero aquel momento mágico de película cada vez que estaba a su lado.
Ella siempre quiso poder despertarle con un beso cada vez que se quedaba entre sus brazos.
Ella siempre deseo que le pidiera que no se fuera nunca y se quedara junto a él.
Ella amaba estar con él, anhelaba sus caricias, buscaba su mirada, se ensimismaba con su sonrisa, era feliz a su lado...


...Quizá por capricho del destino todo esto haya cambiado...

martes, 11 de octubre de 2011

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: "La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos."

El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como esta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oir la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche esta estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque este sea el ultimo dolor que ella me causa,
y estos sean los ultimos versos que yo le escribo.



Pablo Neruda.